En el ámbito de las finanzas y la gestión de activos, las sociedades patrimoniales juegan un papel fundamental en la protección y optimización del patrimonio. En Apialia te explicamos qué son estas entidades, sus beneficios, los requisitos para su creación y los pasos necesarios para constituir una.
¿Qué es una sociedad patrimonial?
Una sociedad patrimonial es una entidad creada para administrar el patrimonio de sus socios, sin dedicarse a actividades comerciales regulares. Su objetivo principal es gestionar y conservar activos como inmuebles, acciones y obras de arte y operan bajo la normativa fiscal vigente, como el Impuesto de Sociedades en España. Estas sociedades son especialmente útiles para individuos y familias que buscan organizar su patrimonio de manera eficiente, facilitando la planificación fiscal y sucesoria.
Ventajas de crear una sociedad patrimonial
Las principales ventajas de una sociedad patrimonial incluyen:
- Protección de activos: ofrecen una capa adicional de protección frente a riesgos personales y empresariales.
- Eficiencia fiscal: facilitan una gestión fiscal más eficiente, potencialmente reduciendo la carga tributaria.
- Planificación sucesoria: ayudan en la transmisión ordenada del patrimonio, evitando conflictos familiares.
- Flexibilidad estructural: permiten cambios en la estructura de activos sin alterar la naturaleza jurídica de la sociedad.
- Privacidad: mantienen la privacidad sobre los activos personales de los socios.
Cuándo es recomendable crear una sociedad patrimonial
Crear una sociedad patrimonial es beneficioso en situaciones como:
- Protección y gestión de un patrimonio considerable.
- Mantenimiento del control sobre los bienes transferidos a la sociedad.
- Planificación sucesoria eficiente, asegurando la transmisión ordenada a las siguientes generaciones.
Impuestos de una sociedad patrimonial en España
En España, una sociedad patrimonial paga el Impuesto de Sociedades al tipo general del 25%. Además, puede estar sujeta a otros impuestos como el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y el Impuesto sobre el Incremento de Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana, dependiendo de sus operaciones. Los ejemplos más significativos de sociedades patrimoniales incluyen:
- Tenencia de inmuebles: para uso y disfrute familiar.
- Arrendamiento de inmuebles: sin empleados a jornada completa.
- Tenencia de valores: gestión de portafolios de acciones o bonos.
Restricciones y costes de creación
Una sociedad patrimonial no puede tener empleados a tiempo completo para evitar ser considerada una actividad económica. Los costes de creación varían, generalmente entre 500 y 4600 euros, incluyendo capital mínimo, notaría, registro y asesoría.
Requisitos para la creación
Para crear una sociedad patrimonial en España, se deben seguir estos pasos:
- Elegir el tipo de sociedad: SL, SA o Sociedad Civil.
- Redactar los estatutos sociales: incluyendo objeto social, denominación, capital social y administración.
- Notaría y registro: constituir la sociedad ante notario y registrarla en el Registro Mercantil.
- Obtener el NIF: registrarse en Hacienda y Seguridad Social.
Es esencial elegir un nombre único, determinar el capital social y redactar los estatutos conforme a la legislación vigente.
Este recorrido sobre las sociedades patrimoniales destaca su importancia en la planificación financiera y la protección de bienes y conocer los requisitos y el proceso de creación es clave para poder aprovechar sus ventajas.