Cataluña se consolida como un punto clave para la inversión extranjera en el sector inmobiliario. Los compradores suelen optar por viviendas en Barcelona y la costa mediterránea, impulsando una demanda que podría incrementarse hacia finales de año. Según datos del Colegio de Registradores de España, los inversores internacionales representaron el 16,79% de las operaciones de compraventa en la región durante el último trimestre, subrayando la importancia de este mercado. En Apialia analizamos estos datos.
Gracias a su clima, ubicación estratégica y variada oferta inmobiliaria, Cataluña sigue siendo un destino atractivo para inversores. Durante este período, fue la quinta comunidad autónoma más demandada, tras Islas Baleares, Comunitat Valenciana, Canarias y Murcia.
En cuanto a la procedencia, el mercado estadounidense destaca como el de mayor crecimiento, abarcando el 20% de las operaciones en Barcelona. Le siguen inversores chinos con un 16%, británicos con un 10%, y franceses y alemanes, con un 7-8% cada uno. Los perfiles de estos compradores son diversos, desde quienes buscan segundas residencias en la costa, hasta aquellos interesados en obtener ingresos a través de alquileres turísticos, o ciudadanos de Europa del Este y del Sur que adquieren apartamentos más pequeños en Barcelona.
La obtención de la Golden Visa es un factor clave que motiva a muchos inversores extranjeros. Nacionalidades como la china, rusa, británica, estadounidense y alemana lideran las compras. Desde la aprobación de este visado en 2013, su vínculo con la residencia ha sido determinante, aunque el anuncio de su posible eliminación generó una aceleración en las decisiones de compra este año.
Las áreas más demandadas en Barcelona incluyen barrios como l’Eixample, Ciutat Vella y Poble Nou, mientras que fuera de la ciudad destacan Sitges, Maresme y la Costa Brava, donde municipios como Rosas, Lloret de Mar y Calella de Palafrugell atraen a ingleses, alemanes y franceses.
Pese a los cambios normativos, los expertos son optimistas sobre el futuro de las inversiones extranjeras en 2024, anticipando un ligero incremento en la demanda respecto a años anteriores.