La creciente dificultad para encontrar viviendas en alquiler, sumada a la alta demanda, está impulsando una práctica cada vez más común: alquilar sin visitar la propiedad previamente. Este fenómeno se está expandiendo con fuerza en grandes ciudades, especialmente en Cataluña. En Apialia te hablamos del auge de los alquileres sin visita.

 

Recientes análisis destacan que más del 10% de los inquilinos actuales optan por cerrar acuerdos sin haber visto físicamente la vivienda. Esta cifra ha aumentado notablemente en los últimos dos años, especialmente en zonas urbanas donde la competencia por acceder a una vivienda es intensa y las propiedades se alquilan en cuestión de horas.

 

Las principales razones detrás de esta tendencia se relacionan directamente con las condiciones del mercado inmobiliario. La combinación de poca oferta y alta demanda obliga a los interesados a actuar con rapidez para no perder oportunidades. Entre los arrendatarios más propensos a alquilar sin visita destacan estudiantes, jóvenes profesionales que se trasladan por motivos laborales, expatriados y trabajadores remotos. Además, la llegada de extranjeros atraídos por la calidad de vida y el auge de sectores como la tecnología y la innovación también alimenta esta dinámica.

 

Sin embargo, esta práctica no está exenta de riesgos. Uno de los más comunes es la discrepancia entre las expectativas y la realidad. La condición real de la vivienda, su ubicación o el entorno pueden diferir de lo que muestran las imágenes o descripciones. También existe el peligro de caer en fraudes o anuncios engañosos que omitan detalles relevantes como desperfectos o problemas de vecindario. Además, se pierden oportunidades importantes que surgen de las visitas presenciales, como negociar condiciones o comprobar personalmente el estado del inmueble.

 

A pesar de estos riesgos, la digitalización ha facilitado que esta modalidad de alquiler siga ganando terreno. Las herramientas tecnológicas permiten acceder a más información, realizar visitas virtuales y gestionar contratos a distancia, lo que optimiza el proceso y ofrece mayor agilidad a quienes buscan vivienda.

 

En Cataluña, esta tendencia muestra un crecimiento sostenido. En los últimos meses, barrios céntricos de Barcelona han alcanzado porcentajes de alquileres sin visita que superan el 15%, y todo apunta a que esta práctica seguirá en aumento en el futuro cercano, impulsada por la escasez de oferta y la constante presión del mercado.